La respuesta a esto es clave para entender qué es lo que te está aquejando y por qué nos sentimos como nos sentimos.
Hablando con mis pacientes, la mayoría me comenta, que en un principio, nunca supieron que lo que tenían era ansiedad. Estuvieron años y años viviendo con ella, incómodos, disconformes, sintiendo que algo no andaba del todo bien, pero aún así, no lograban identificar esto como ansiedad.
Existen muchas razones por la cuáles puedes tener problemas a la hora de identificar si lo que estas sintiendo es o no ansiedad:
1- No tener conocimiento sobre su característica y sintomatología
2- Estar menos conectado con uno mismo y por lo tanto menos consciente de lo que sientes día a día.
3- Confundir la ansiedad con otro tipo de sintomatología.
4- No tomarle el peso suficiente y por lo tanto “hacer como que no existe”.
Debido a la importancia de su tratamiento y a que se pueden lograr grandes cambios en tu vida, si logras identificar lo que te pasa y así recurrir a un profesional experto en el tema, es que hoy quiero hablarte de las claves para saber si lo que tienes es ansiedad o no.
1- La ansiedad a diferencia de otros trastornos se expresa, principalmente, de manera física. Es decir, podemos sentir que de un momento a otro nos palpita el corazón con mayor fuerza, nos transpiran las manos, comienzas a sudar, temblar, incluso puedes llegar a sentir náuseas, entre otros síntomas.
2- Existe una constante preocupación por el futuro, y destacan pensamientos catastróficos (si o si creo que algo malo va a suceder).
3- Una de las características principales es que existe MIEDO. En general cuando hablamos de ansiedad hablamos de miedo.
4- La persona se encuentra constantemente en alerta y tiende a la evitación. Es decir, evita situaciones en dónde pueda volver a sentir que su ansiedad aumenta.
5- Aparece la somatización (emoción expresadas a través de dolencias físicas): dolor de estómago, colon irritable, dolor de cabeza, bruxismo, etc.
Si cuentas con 2 o más de estos puntos claves, es probable que lo que estés sintiendo sea ansiedad y por lo tanto, ya estás un paso más adelante en tu mejoría, al saber qué es lo que te está aquejando. Te aconsejo que te conectes contigo mismo, por lo menos una vez al día durante 10 minutos, para observarte y ver qué es lo que está pasando contigo. De esta manera podrás estar atento/a a tu sintomatología, identificarla y así poder tomar las acciones pertinentes para trabajarla.
Si sientes que tu ansiedad te limita a la hora de poder realizar actividades, enfrentar desafíos y sientes una incomodidad o intranquilidad constante, te aconsejo que busques ayuda profesional. No dejes pasar más tiempo del necesario, ya que como toda “enfermedad”, mientras más tiempo pasa, se hace más difícil trabajarla. Además, ¿para qué sentirnos de esa manera, cuando lo que te pasa tiene solución? La ansiedad tiene tratamiento y es bastante efectivo, se ven resultados inmediatos, desde las primeras sesiones.
Mi misión es enseñarte nuevas herramientas para enfrentar tu ansiedad, consiguiendo bajar sus niveles, de tal forma que logres sentir mayor libertad, tranquilidad y alcanzar tu potencial. ¡Quiero que logres empoderarte ante tu ansiedad!
